miércoles, 21 de agosto de 2019

Stuber express (Michael Dowse, 2019)

La nueva película de Michael Dowse actualiza el subgénero de las buddy films, películas donde un par de personajes totalmente opuestos deben unirse para conseguir un fin, esto con la peculiaridad que casi toda la historia sucede a bordo de un uber.
Stu (Kumail Nanjiani), es un tipo tranquilo e idealista, el trabaja en una gran tienda de herramientas y cuando cae la tarde conduce un coche de alquiler uber con la intención de generarse mayores ingresos, luego de haber invertido sus ahorros en un gimnasio, el emprendimiento de su mejor amiga y amor secreto, Becca (Betty Gilpin.
Pero una tarde, la apacible vida de Stu cambia cuando sube a su uber Vic Manning (Dave Bautista), un duro policía que sigue la pista de un peligroso asesino, por lo que Stu se ve obligado a participar, buscando salvar su vida y sobre todo, obtener las cinco estrellas por su servicio.
La película de Dowse sigue al pie de la letra los códigos del subgénero, y lo hace con resultados dispares, la introducción se alarga demasiado y esto provoca que el ritmo en el primer tramo del relato no sea el más llevadero.
Lo mejor de la película se da cuando por fin deben interactuar los personajes de Bautista y Nanijani, quien es el soporte cómico de la historia y lo hace de la mejor manera, con diálogos ingeniosos y bastante relajados.
Y es precisamente en la buena interacción entre sus protagonistas y la química resultante donde descansa lo mejor de una película bastante genérica y olvidable y que se parece a las muchas otras películas que se inscriben dentro de las buddy films, pero que resulta efectiva y divertida como entretenimiento.

viernes, 14 de junio de 2019

Tolkien (Dome Karukoski, 2019)

Tolkien cumple con todos los requisitos del biopic clásico, nos ofrece una visión de su vida privada desde que es un niño hasta alcanzar la madurez, pasando por algunos momentos importantes de su vida como son la sociedad TCBS (Tea Club and Barrovian Society), la grandes enseñanzas del profesor Joseph Wright, la dura etapa de la guerra y su relación con Edith Bratt.
Teniendo en cuenta esto, la película no es una oda a la Tierra Media, no trata de la creación del Señor de los Anillos como muchos pensábamos, esta película toma otro camino. Se enfoca más en su pasión por la filología, junto al profesor Joseph Wright (interpretado por Derek Jacobi), uno de los mejores momentos de la cinta.
La imaginación como elemento audiovisual
Mezclar la potencia visual del cine junto a la imaginación desbordada de un escritor como Tolkien, es victoria segura. El film abandona los tentáculos del biopic clásico para adentrarnos en un mundo fantástico surrealista. Se crea un paralelismo, donde un combate de trincheras de la I Guerra Mundial se convierte en un duelo medieval, con dragones y criaturas fantasmagóricas de por medio.
Es la gran escena que te lleva preparando toda la película a fuego lento, y aún siendo uno de los momentos más impactantes, como espectadores nos quedamos con la miel en los labios con ganas de más. Dura poco tiempo y no salen tantas criaturas como te prometía en un principio, una lástima que no se explotara esta idea al máximo.

domingo, 2 de junio de 2019

Mr. Link. El origen perdido (Chris Butler, 2019)


Mr. Link. El origen perdido (Chris Butler, 2019)
por Adelaida Valcarce

Dirigida por Chris Butler (“ParaNorman”), Mr. Link. El origen perdido abandona la temática puramente fantástica vista en Kubo y las dos cuerdas mágicas (2016) o Los mundos de Coraline (2009), todos estos films del estudio Laika , para abrazar de lleno la mitología, valiéndose de las criaturas  propias de estas leyendas. La película narra la historia de Sir Lionel Frost (Hugh Jackman), un optimista e incrédulo investigador de mitos a la antigua usanza que intentará demostrar a sus compañeros de club que están equivocados, encontrando a la única criatura legendaria que no  ha sido hallada: El Eslabón Perdido. En su camino se le unirá el Señor Link (Zach Galifianiakis), una especie de Yeti  y una antigua novia (Zoe Saldana)

Había una gran expectación por ver este trabajo, que no ha decepcionado en absoluto. Se trata en palabras de su realizador de una de esas historias como las que  veíamos de niños y que nos gustaban tanto que visionabamos una y otra vez, es una película que aspira a convertirse en parte del acervo cultural de una generación.  y su héroe, un poco atolondrado, pueda convertirse en una especie de Indiana Jones de la animación. 

Butler, va más allá, y consigue una narración entre la buddy movie ( película de colegas) y una aventura trepidante cruzando medio mundo, mientras los protagonistas van tejiendo su relación como si de Sherlock Holmes y Watson se tratara. El leifmotiv es el compañerismo , el humor. y por supuesto admitir que nuestro lugar en la vida no es dónde, sino con quién estamos.

Uno de los elementos más cuidados con gran acierto es el diseño de producción para recrear una época victoriana colorida pero muy estilizada con gran inspiración en los estampados de aquellos años, con dibujos intrincados y muy originales.

La animación en volumen, marca de la casa de Laika, se ha revelado perfecta para esta trama sobre el eslabón perdido. la propuesta era hacer todo aquello que aparecería en una película de accin real, pero en miniatura. Ahí están los escenarios exóticos, las criaturas entre la realidad y los sueños y esa fotograiia que recuerda a las clásicas del National Geographic, de hecho se visionaron decenas de volúmenes recopilatorios de la revista, sobre todo de la época reflejada en el film.

Para finalizar, profundizar en los mensajes que la trama pretende trasmitir sin imponer, el compañerismo como contrapunto de la soledad de los personajes, la crítica a las sociedades herméticas y anticuadas, una clara apuesta por la defensa del medio ambiente, el empoderamiento femenino protagonizada por Adelina e incluso un guiño a la identidad de género. 

En definitiva queda en la retina una narración familiar muy recomendable que se disfrutara tanto por pequeños como mayores y unos personajes que pueden dar muchas alegrías a Laika en el futuro. Así sea...

Ártico (Joe Penna, 2018)

Ártico (Joe Penna, 2018)


por Adelaida Valcarce


Las películas sobre experiencias de supervivencia extrema, parten de una limitación argumental y siguen un patrón muy particular . Se trata de sobrellevar una existencia en un medio inhóspito intentando salvaguardar la vida y encontrar como salir de allí con los medios que posee el protagonista y agudizando el ingenio hasta limites insospechados.  A pesar de ser una trama siempre similar, no deja de ser emocionante seguir las peripecias agotadoras y silenciosas del atrapado en circunstancias tan adversas.

El film de Joe Penna no es una excepción a lo dicho anteriormente. En su germen se pensó que la acción transcurriera en Marte, pero tal idea se abandono ante irrupción de Ridley Scott con una película protagonizada por Matt Damon ( 2015), pero finalmente se optó porque la narración sucediera en un espacio ártico.

El realizador, curtido en cortometrajes y series de televisión, se enfrenta aquí a su primer largo sin verse acobardado por rodar con solo dos actores y escasa lineas de dialogo, y todo esto sin  escatimar esfuerzos para lograr conectar al espectador con esta historia de superación personal en un medio tan duro, consiguiendo que sintamos en nuestras carnes el frí y nos arrebujemos en el asiento a la espera de los acontecimientos. y todo esto comandado por un superlativo Mads Mikkelsen (La caza) que es capaz de llevar la película sobre sus hombros sin esfuerzo. De hecho la primera escena es impresionante: ver al protagonista cavando freneticamente durante horas para ver que sólo intenta que la señal de SOS no quede cubierta por la nieve y sea visible desde el aire.


Un acierto del realizador es que la primera parte del film transcurra de forma monótona, viendo las rutinarias tareas que el Overgard realiza diariamente, en parte para ser encontrado y auxiliado y en parte para no volverse loco, manteniendo unos horarios regulares marcados por los pitidos de su reloj. No puede hablar con nadie porque nadie hay, pero si tiene que enfrentarse a osos por ejemplo que le dificultan su día a día. No es posible pensar en desfallecer.

En la segunda parte irrumpe otro personaje, superviviente de un accidente aéreo y junto al que nuestro héroe intenta llegar a algún lugar civilizado. El estado de aquel, de extrema gravedad,  hace que la película siga transcurriendo casi sin palabras. La dicotomía entonces es evidente: sobrevivir en el precario campamento que ha improvisado el protagonista o aventurarse hacia lo desconocido sin saber si el éxito le acompañara. Morir esperando o buscar la muerte.

El film se rueda en un entorno tan bello como cruel y eso es parte de su encanto subrayado por una fotografía muy notable de Tomas Om Tomassom, nacido en la Islandia donde se filma.

En definitiva, estamos ante una película notable y que atrapa a pesar de no ser corta. El mérito es de su director y de su protagonista sin duda.

domingo, 26 de mayo de 2019

El hijo (David Yarovesky, 2019)

James Gunn, director productor y guionista estadounidense, tiene un pasado prestigioso ligado al cine de terror y underground. Hay que destacar su buen hacer el libreto de Amanecer de los muertos (Zack Snyrder), pero tambien su incursion en el cine más  comercial con Guardianes de la Galaxia y Escuadrón suicida, Pero el interés por el mundo de lo alienígena no le es ajeno, como se puede encontrar en sus primeros películas. Con estos antecedentes era muy esperado el estreno de este film y ver si la dirección de David Yarovesky (The hive) había respetado el espíritu transversal del guión, con elementos de superhéroes, terror, gore y extraterrestes. El resultado queda aprobado con nota y la mano de Gunn como productor se aprecia y mucho. Lo extraordinario del argumento ha sido la innovacion que supone.

En El hijo se pueden rastrear algunos elementos coincidentes con aquellas obras del debut de Gunn. Se trata de las invasiones extraterrestres en zonas rurales. si a ésto unimos la vuelta de tuerca que supone imaginar a un Superman oscuro, tenemos el argumento de la película que nos ocupa.

Un matrimonio que vive en un pequeño pueblo, ansían desde hace años ser padres sin lograrlo hasta que un día cae un objeto del cielo con un bebe al que adoptan. El niño crece sin problemas hasta los doce años cuando empieza a ser consciente de sus facultades físicas y mentales. Hasta aquí podría tratarse del argumento del hombre de  acero, pero...¿ y si en lugar de usar sus poderes para el bien los emplea para el mal'

La historia es sencilla por conocida pero el desarrollo de la misma supone una grata sorpresa para el espectador. no se detiene en florituras, va al grano y se apoya en unas imágenes impactantes que permanecen en la retina sin compasión.

Especial interés tiene la evolución de los padres que pasan de la defensa a ultranza del joven , al estupor, superados por los acontecimientos, ya que las habilidades del menor en lugar de convertirlo en un héroe,  son el principal obstáculo para que encaje en la comunidad. muy reseñable también es la interpretación de ....como Brandon Breyer, el protagonista. que con un simple gesto es capaz de parecer un ángel o un demonio.

Cierto es que no es una película perfecta y quizá el final baje un poco la intensidad respecto a la mayor parte del metraje, pero su mirada fresca y sin prejuicios da un aire nuevo al género. Es de desear que el camino iniciado por este trabajo haga ampliar horizontes y rompa las reglas ya que el mundillo super heroico ya esta lo suficientemente saturado como para desear un cambio de rumbo.



domingo, 12 de mayo de 2019

Sombra (Zang Yimou, 2019)

Una sombra es una región de oscuridad donde la luz la obstaculiza o esconde. Ocupa todo el espacio detrás del objeto, es más, es el mismo objeto opaco con o sin fuente de luz frente a él. La sección eficaz de una sombra es una silueta bidimensional o una proyección invertida del objeto que aspira a la luz. Esta definición de una palabra nunca estuvo tan pegada a la realidad, a la realidad de aquellos que necesitan ocultarse para salvar su vida. Según la Historia, en China, era muy habitual recurrir a estos personajes que sustituían al original en momentos críticos.

El condado de Pei está bajo la administración de un caprichoso y arbitrario rey. El comandante de su ejercito, considerado por todos un héroe, se ve forzado a sobrevivir en la corte creado una sombra, un doble capaz de engañar al mismo monarca. Esa será su única arma para eludir a sus múltiples enemigos y preparan sigilosamente el ataque a la vecina ciudad de Jing, hecho que tendrá unas consecuencias inesperadas para todos. La época representada es la de los Tres Reinos (280-220 AC)

Esta es la trama sobre la que Yimou arma  un brillante y elegante ejercicio sobre el poder y su significado, sobre la tiranía, sobre la lealtad y sobre las pasiones humanas que definen las vivencias de forma atemporal no importa a quién. El envoltorio para tan ambicioso proyecto es una película de artes marciales que supera con creces su propio género. Porque reducir a un conjunto de luchas lo que pasa ante los ojos del espectador es una simplificación injusta: la trama recuerda a las de Kurosawa y a las obras de Shakespeare. No en vano, el honor, la ambición y el amor son tradicionalmente los motores del hombre y el realizador se deja seducir por su reflejo.



Y es que a pesar de todo lo dicho, Sombra es un drama violento y delicado en el que no escasea la sangre, con un fuerte simbolismo del Yin y el Yang, y con una poesía innegable en las imágenes, que sin ser blanco y negro, juega con una amplia gama de grises y colores fríos que se ven acentuados por la insistente lluvia que cae durante todo el metraje.

Especial mención merece la doble actuación de Deng Chao, interpretando al comandante y su doble y la delicada protagonista femenina Sun Li que no deja de sorprender a pesar de su aspecto frágil.

 El resultado es de una belleza abrumadora y de unas escenas cargadas de lirismo que juega con el mismo titulo del film, ya que la iluminación juega con un mismo patrón de oscuridad, subrayado por
una sonoridad que estremece en la butaca. Particular originalidad tiene la batalla sobre el tablero del Yin y el Yang y la entrada del ejercito en la ciudad invadida.

Definitivamente, Yimou vuelve a la mejor tradición cinematográfica y filma en estado de gracia y pulso firme un argumento universal que no deja de sorprender por conocido. y que nos retrotrae a la emoción que suscitaban sus otras obras maestras (Héroe, La Casa de las Dagas Voladoras). Solo queda disfrutar y dejarse llevar por el torrente de sensaciones que genera la película.

La tragedia de Peterloo (Mike Leigh, 2018)

La tragedia de Peterloo (Mike Leigh, 2018)

por Adelaida Valcarce


Como asistir a una clase de Historia. Éste el el resumen del nuevo trabajo de Mike Leigh (Secretos y mentiras, Mr Turner, El secreto de Vera Drake) porque en 
efecto, La Batalla de Peterloo tiene una clara vocación didáctica que no se esconde en ningún momento.

El fin del periodo 1819 y las pésimas condiciones económicas, junto a la falta de Sufragio en el Norte de Inglaterra p como provocó cierta radicalización social: El Sindicato Patriota de Manchester, dirigido por el conocido orador Henry Hunt organizó una manifestación para reclamar una reforma parlamentaria. Poco 
después de comenzar el mitin, los magistrados llamaron a las autoridades militares ( no había una policía como tal en la época) para detener a Hunt y 
dispersar a los manifestantes. Pero la caballeria cargó contra los presentes en medio de la confusión provocando una masacre. El nombre de Peterloo
se dió como comparación ironica con la Batalla de Waterloo que había sucedido unos años antes, aunque en realidad los hechos narrados suceden en Peter`s
Field.

Leigh narra los acontecimientos de forma fidedigna y cronológica, lo cual es importante para comprender el creciente clima de desasosiego que impregnan
estos acontecimientos y su trascendencia, apoyándose en una dirección artística muy sobresaliente y una fotografía que subraya los movimientos de masas
que suceden hacia el final de la película. El realizador no desaprovecha la ocasión´para utilizar la trama a fin de realizar una ácida crítica social acerca de
los poderosos y los pacientes clases populares que en definitiva son siempre los perjudicados.

Para componer este entramado narrativo, el director no escatima en minutos (más de dos horas) ni en personajes, ya que a fin de contar lo acaecido de 
forma fiel, nos presenta a cada uno de los parlamentarios, oradores, periodistas y clases trabajadoras, con un hilo conductor, un joven desfavorecido que 
encarna los excesos del poder sobre los pobres.

La Batalla de Peterloo es un film academicista pero interesantísimo, con fuerza arrolladora en cuanto a sus imágenes  y que saca de la oscuridad un
momento desconocido fuera de Inglaterra pero también dentro, Sólo hay un pero, y se trata de que el rigor en el discurso, a veces deja de lado la emoción
y eso es algo que en una película de estas características es esencial. No en vano, los 60.000 manifestantes, merecían algo más de emotividad, pero a
cambio nos entrega rigor, dialogo y discurso poniendo ante nuestros ojos como se va larvando un proceso de lucha de la clases populares contra sus 
opresores y da un halo de contemporaneidad al relato, Peterloo no está tan lejos en la actualidad.

domingo, 28 de abril de 2019

Uglydolls: Extraordinariamente feos (Kelly Asbry, 2019)



Uglydolls: Extraordinariamente feos (Kelly Asbury, 2019)


por Adelaida Valcarce




El 1 de mayo llega a los cines españoles esta película basada en los famosos juguetes  creados por David Horvath y Sun-Min Kim. Si nos basamos en lo tradicional, estos peluches son raros, o feos, como ellos mismos se denominan. La creación de los mismos se basa en la idea de que la belleza esta predcisamente en las cosas que nos diferencian.  El film está dirigido por Kelly Asbury (los Pitufos: La aldea escondida, Shrek 2, Spirit: El corcel indomable) y cuenta como estos  muñecos diferentes  se introducen en el  perfecto mundo de los juguetes, lugar donde se entrenan para gustar a sus potenciales dueños, los niños del mundo.


Los habitantes de Uglyville no son conscientes de sus defectos y viven en una fiesta continua hasta que descubren que en lo alto de la colina se encuentra Perfección, la academia a la que asisten los juguetes sin taras,  Moxy, la protagonista, nos da una lección de autoestima y perseverancia,  ya que es consciente de su aspecto poco atractivo y no ve nada malo en ello, es más, no va a dejar que nada le haga abandonar sus sueños. Si en algún momento su ánimo decae, coge fuerzas para trasmitir que lo que realmente importa es la gente que te quiere seas como seas.


La película trata de transmitir ese mensaje positivo y aleccionador en esta sociedad actual que impone cánones de belleza inalcanzables además de irreales, e intenta que su mensaje cale en los más pequeños ya  que es en la niñez cuando menos prejuicios se tiene hacia lo diferente. la inocencia de la infancia juega a favor de no juzgar a nade y aceptar a todo el mundo y la pretensión es que esta actitud no cambie con el paso de los años.


Precisamente  Uglydolls ahonda en la belleza de lo diferente, en la educación en lo que nos es ajeno, no sólo en la apariencia física, sino en la forma de ser o sentir, en los diferentes contextos, situaciones, historias y vivencias, Toda vida es única e irrepetible sin tener en cuanta su aspecto externo.




Tras este serio cometido educativo, el film se deja llevar por el camino de la despreocupación con música pegadiza y divertida. Las canciones se ocupan de transmitir que la idea llegue a los más pequeños: nadie es perfecto y no importa.  En la banda sonora original intervienen Nick Jonas o Pitbull y en al versión española reconoceremos  las voces de Blás Cantó entre otros.




A pesar de la apariencia de simplicidad de laanimacioón, no es tal,  ya que los muñecos están hechos de diferentes texturas perfectamente diseñadas. Se puede distinguir el hilo con el que los cosieron, los cabellos de lana y los cuerpos peludos. También los efectos sonoros están muy conseguidos, de modo que la unión entre oído y vista permiten imaginar como sería el tacto de lo que vemos en la pantalla.


En definitiva, se trata de un viaje imprescindible hacia lo diferente y que invita a la inmensa alegría de ser otro, de ser otra. No hay pedagogía posible sin el radical reconocimiento de las diferencia, y los futuros adultos deben acercarse a ella.





domingo, 21 de abril de 2019

Donbass (Sergei Loznitsa, 2018)

Donbass (Sergei Loznitsa, 2018)

por Adelaida Valcarce


En 2014 tuvo lugar una revolución en Ucrania que derrocó al Presidente pro-ruso Viktor Yanukovych y 
su gobierno después de meses de protestas en las calles, por sus políticas que alejaban al país de la
esfera de la Unión Europea. La respuesta de Rusia fue anexionarse la región de Crimea con el apoyo
de sectores de la población de la zona. A lo que siguió el comienzo de un conflicto armado entre el
gobierno ucraniano y las fuerzas separatistas de las autodeclaradas República Popular de Donetsk y
República Popular de Lugansk que sigue hasta nuestros días.

La cuenca del Donetsk, o Donbass, es una región histórica, cultural y económica del este de Ucrania.
La palabra «Donbass» es un acrónimo formado a partir de cuenca del rio Donetsk,  que discurre por su
territorio. La simple adopción de Donbass como íitulo de la película, sirve para saber de que parte está
el realizador. El film fué presentado en la sección Un Certain Regard en el último Festival de Cannes,
ganando el primero premio en la misma y y también en el Festival de Sevilla. 

La guerra abierta es el contexto que sirve de trasfondo a Donbass (Sergei Loznitsa). Una guerra que
apenas tiene visibilidad en los medios occidentales después de cuatro años y que tiene profundas
implicaciones respecto a la influencia y las ideas colonialistas y tácticas imperialistas de la actual Rusia,
que aquí se retrata a través de la recreación inspirada por vídeos domésticos reales de ciudadanos de
la zona.

La puesta en escena se basa en una serie de episodios interconectados entre si por algún personajes
siendo una crítica despiadada del dia a dia de la zona : La incautación de riqueza y posesiones para
ponerlos al servicio de la guerra, el robo de ayuda humanitaria, el delirante sistema burocrático y, sobre
todo, las tácticas de propaganda usadas para legitimar una lucha en la que incluso participan de forma
no oficial fuerzas militares rusas. Este aspecto de utilización de la televisión para manipular la opinión
pública sirve como crítica despiadada también a los colaboracionistas con la barbarie, a pesar de ser
civiles víctimas de toda la maquinaria creada para apelar a las emociones más viscerales de sus
compatriotas. Especialmente sobrecogedor es la escena del colaboracionista linchado por la multitud.

La película es un mosaico de lo peor del ser humano, de la falta de empatía con el prójimo y en
definitiva un documento imprescindible de la situación que se vive en la región: un cine combativo,
para espectadores curiosos del mundo que nos rodea y un grotesco espectáclo  que nos debe hacer
reflexionar sobre la actualidad 
internacional.

jueves, 11 de abril de 2019

El día que vendrá (James Kent, 2019)

El día que vendrá (James Kent, 2019)

Por Adelaida Valcarce.

El día que vendrá, la adaptación de la exitosa novela de Rhidian Brook, llega a
las salas dirigida por James Kent, realizador curtido en el ámbito de las series
televisivas. El proyecto de llevar la obra al cine recayó en un primer momento
en Ridley Scott, pero finalmente se retiró del proyecto, que quedó en manos
Kent, quien ha rodado un film muy interesante.

Finalizada la Segunda Guerra Mundial, Hamburgo ha sido ocupada por los
británicos. Los años de enfrentamiento no habían pasado en balde, y nada
parecía importante ya en una ciudad donde todo eran cascotes y colillas de
cigarros que los niños mendigaban por las calles.
Esta ciudad alemana, precisamente, es la que más sufrió los bombardeos
aliados, hecho histórico que hemos visto muy pocas veces en el cine. El
coronel Lewis Morgan y su esposa se instalan en una de las mansiones
requisadas a los alemanes. La integridad y el deseo de confraternización del
coronel, hacen que llegue a un acuerdo con los ocupantes de la casa, la familia
Lubert, compuesta por un arquitecto viudo de modales exquisitos y su hija
adolescente, para que ambas familias puedan vivir en armonía. Como dato
curioso, el autor de la novela se ha basado en las propias experiencias
familiares, ya que su padre vivió una situación parecida, compartir casa con un
alemán. 
Ese es el punto de partida de El día que vendrá, donde no solo se divide una
casa, los Morgan en el primer piso y los Lubert en la buhardilla, sino que los
personajes han creado compartimentos estancos dentro de sí mismos para
poner a raya sus traumas y poder sobrevivir. Sólo es cuestión de tiempo que
las fronteras se desmoronen.
  Hay épocas muy retratada en el cine, y una de ellas es la Segunda Guerra
Mundial. Sin embargo, pocas veces se habla de lo que sucedió justo después,
de ahí el interés del film que destaca en un primer momento. Pero hay un
elemento igualmente interesante, que es presentar la mansión como un
microcosmos que refleja las fronteras, el recelo, la sospecha que se cernió
sobre la Alemania ocupada por los aliados tras el fin de la guerra, pero también
el perdón. El realizador consigue captar la atmósfera de aquel momento
histórico, que pone en juego la dignidad humana y da una vuelta de tuerca a la
versión oficial de nuestro pasado. Es un país diezmado, dividido, que se sabía
vencido e intentaba sobreponerse, y unos personajes llenos de sentimientos y
pasiones a flor de piel.
En definitiva, una buena historia en la que, pese a desarrollarse a un ritmo
pausado, nunca dejan de suceder cosas ante la atenta mirada del espectador

ávido por saber. Si hay que poner un pero, éste sería que, pese a las
magníficas interpretaciones de Keira Knightley, Jason Clarke y Alexander
Skarsgård, hay una cierta superficialidad en el final del drama, pero este es un
pecado menor, habida cuenta del disfrute que supone el visionado de la cinta.
La reconstrucción minuciosa de la época, y unos personajes retratados con
gran acierto, bien merecen una visita al cine en los próximos días.

jueves, 4 de abril de 2019

La sombra del pasado ( Florian Henckel von Donnersmarck, 2018)


La sombra del pasado ( Florian Henckel von Donnersmarck, 2018)


Por Adelaida Valcarce 


La nueva película del director de La vida de los otros (2006) regresa al pasado de Alemania, al nazismo y años posteriores con una mirada penetrante y muy sugestiva a través del arte.
La cinta comienza con la exposición de Arte Degenerado  (Entartete Kunst).que tuvo lugar en Múnich en 1937  recreada a la perfección para la ocasión.  Dicha muestra reunió obras de la vanguardia  a fin de mostrar que su ejecución era en realidad fruto de la inferioridad racial de los artistas. Dice Henckel que todo aquel que contempló aquellas obras, sabía que asistía a algo efímero porque su fin era la destrucción de las mismas o esa era la idea inicial, ya que muchos jerarcas nazis se apropiaron de algunos lienzos que fueron salvados de la quema de esa forma o fueron vendidas a marchantes internacionales.  

La muestra abrió un 19 de julio y se mantuvo hasta el 30 de noviembre. Por los salones del Instituto Arqueología de Múnich se presentaron cerca de 600 obras de algunos artistas cuyo legado es hoy indiscutible: Marc Chagall, Wassily Kandinsky, Paul Klee, Oskar Kokoschka, George Grosz, Emil Nolde y Ernst Ludwig Kirchner, entre otros maestros del modernismo. 


Tras este impactante comienzo, somos testigos del devenir de un artista, Kurt, inspirado  en la vida real  de Gerhard Richter, durante tres horas de metraje que pasan en un suspiro. Asistimos a su formación en el nazismo, el fracaso del Este y finalizamos en su huida a Occidente donde encuentra su verdadera voz en el ejercicio de la libertad artística sin olvidar el pasado: el suegro del pintor también fue un alto cargo en el Reich y había conseguido camuflarse con la apariencia de un honorable y respetado médico.  

En efecto sería ingenuo pensar que toda la sociedad post nazismo no había tenido ninguna vinculación con el ideario hitleriano; por el contrario la inmensa mayoría de personas con cargos relevantes  consiguieron esconderse socialmente y continuaron  como si nada hubiera pasado.

Henckel no busca vengar las atrocidades del pasado, pero si redimir a varias generaciones que viven con pesar lo sucedido en décadas anteriores y que obsesivamente se  castigan por la culpa.

El resultado del ambicioso proyecto es una película redonda, con interpretaciones verosímiles, donde el ciudadano medio encontrará un alivio a sus pesadillas más terribles y podrá hallar aliento para continuar.

A lo largo de la historia del cine, numerosas obras maestras se han encargado de revivir y recordar, para tener siempre muy presente, grandes crímenes de la humanidad, como es el genocidio perpetrado por la Alemania nazi. En el caso de La sombra del pasado, la mirada es cruda pero esperanzadora, de ahí su genialidad. Para que la historia nunca se repita

martes, 26 de marzo de 2019

Onyx, los reyes del grial (Roberto Girault, 2019)

Onyx, los reyes del grial (Roberto Girault, 2019)

por Adelaida Valcarce 


Una de las historias que se relacionan con el ciclo artúrico es la leyenda del Santo Grial. En dicho relato se ven personajes tan emblemáticos como el rey Arturo, Perceval, Gawain y el Rey Pescador, y la búsqueda de un tesoro con propiedades mágicas. Y no se trata de cualquier tesoro, sino del que ha suscitado más pesquisas sobre su realidad y ha gestado más leyendas. La búsqueda del Cáliz utilizado en la Última Cena por Cristo ha involucrado a templarios, cátaros y otros misterios medievales. No se puede negar que este conocido tesoro ha hundido sus cimientos en el imaginario común, hasta el punto que su historia ha saltado al mundo del celuloide con películas como Indiana Jones y la última Cruzada y El código da Vinci, entre otras, y a la serir que viene a añadirse con la cinta que se acaba de estrenar en las pantallas españolas, Onyx, los reyes del grial de Roberto Girault


Innegable es el atractivo de la historia como tambien son numerosos los candidatos a ser identificados como la copa de la última cena de Jesús donde dió por primera vez la Eucaristía antes de ser crucificado. La que siempre ha contado con más puntos de veracidad ha sido la copa guardada en la Catedral de valencia, hasta hace tres años. La estrella de la colegiata de San Isidoro, en León, ya no es su afamado panteón real, conocido como la capilla sixtina del románico por sus espectaculares murales. Le ha robado protagonismo el cáliz de doña Urraca, una enigmática joya de la orfebrería medieval que ha pasado de exhibirse en una vitrina con el resto del tesoro del museo a brillar en solitario. Esta apasionante investigación llevada a cabo por dos profesores universitarios es el germen de la pelicula. 

Tratada con rigor, entre el documental y la ficción, se mueve este interesante ejercicio con forma de thriller que interesa no solo por su forma, sino por su fondo: porque en Onyx no sólo se narran los hechos y casualidades que han llevado a la datación documental de la copa sino que nos da una lección de historia impagable por rigurosa sin dejar de lado el entretenimiento. ¡Bravo, Roberto!

viernes, 22 de marzo de 2019

Dolor y gloria (Pedro Almodóvar, 2019)

Dolor y gloria (Pedro Almodóvar, 2019)


Por Adelaida Valcarce 


Un fino hilo casi imperceptible une toda la filmografia de Pedro Almodóvar. Cada película tiene mucho de él y su mundo, de sus recuerdos en definitiva. La órbita cosmopolita de Madrid, se opone a esos pueblos de la España profunda, con personajes rudos, fuertes y sobre todo muy de verdad
Lo local sirve a Pedro para ahondar en los sentimientos que en Dolor y Gloria nos muestra como en ninguno de sus films. Nos encontramos ante un realizador menos provocador que antaño, deslizándose de la comedia al melodrama y mostrando de forma tajante su realidad, sus miedos, sus afectos y su interior. Lo hace como siempre sin renunciar a su cosmos, tan rico porque si hay un director que ha sabido hacer todo su cine reconocible es Almodóvar.

En Dolor y gloria, Salvador Mallo es un director muy reconocido  que  lleva años sin hacer peliculas. Vive una existencia marcada por sus males fisicos pero tambien por los males del alma. El detonante que inicia la accion es la restauracion de una de sus antiguas cintas y la idea de contactar con uno de los actores que alli actuaba y con el que lleva sin hablarse desde el rodaje.
A continuacion y mediante continuas ensoñaciones del pasado, van pasando distintos momentos clave del  Salvador niño, con la constante presencia de la madre y que han forjado lo que es en la actualidad

Dolor y gloria se centra en la necesidad de alcanzar cierta redención a través del arte y de la indisoluble unión de la propia vida y las pasiones formales que dan sentido a la vida de Mallo (un inspiradísimo Antonio Banderas). Es, por tanto, una magnífica encrucijada de auto-referencias, fragmentos que podríamos denominar retratos costumbristas y autoficción con abundantes meandros  que nos hacen entrar y salir del torrente narrativo principal, sin conseguir dilucidar nunca del todo qué separa la realidad de la ficción. En este aspecto, podríamos decir que en  en la película es fácil ver al Almodóvar más honesto y real de todas sus cintas pero sin resultar impúdico.

Probablemente nos encontramos ante una de las mejores cintas de la carrera de Pedro.  El manchego se mueve como pez en el agua a lo largo del metraje, contando esta historia con rasgos autobiográficos. Antonio Banderas da vida a un personaje a imagen y semejanza del realizador, con el recuerdo a su madre, interpretada por Penélope Cruz y Julieta Serrano en los distintos momentos de la acción.  Todas las actuaciones son sublimes y a ello se une  la presencia de otras grandes actuaciones como la de Asier Etxeandia. Actores con gran carrera profesional que se entremezclan con jóvenes artistas nuevos en una simbiosis perfecta.

El realizador continúa con su exitosa y singular visión del cine, aportando una mayor austeridad, pero como un gran narrador que nos lleva por un viaje emocional a través de un guion y un montaje excepcionales. Almodóvar cura de esta manera sus viejas heridas, donde el dolor y la gloria han estado muy presentes, pero también el deseo.

Sólo una recomendación al espectador: disfrute de los pequeños detalles siempre tan cuidados por el director, vea lo que enmarca cada escena, sus fotos familiares, los cuadros que ama y decoran las estancias, los libros que aparecen en los encuadres y no están ahí  puestos al azar , y sobre todo la luz de la niñez, su sutileza y calidez sin dejar de ser luminosa. Estamos ante una obra maestra para disfrutar muchas veces. 

jueves, 14 de marzo de 2019

Beautiful Boy ( Felix Van Groeningen, 2019)

Beautiful Boy ( Felix Van Groeningen, 2019)


Beautiful Boy se presentó  en la 66 edición de la sección oficial del Festival de Cine de San Sebastián, y está dirigida por Felix Van Groeningen, realizador de las muy notables  Bélgica ( 2016) y sobre todo Alabama Monroe (2012).

La película narra una historia basada en el best seller de las memorias homónimas de David y Nick Sheff: Steve Carell y Timothée Chalamet encarnan a un padre y a su hijo, con una gran conexión, que deben enfrentar al monstruo de la adición, que pone a prueba permanente todo el amor que han construido juntos a lo largo de los años. David es un padre de familia cálido, entregado, que ha construido un paraíso para su familia. Pertenece a una clase acomodada. Todo se pone en peligro cuando su hijo adolescente, Nick, es devorado por la adición a diferentes sustancias. La droga toma el mando de sus vidas, no tiene limites y el joven entrará  desde entonces  en un vacío cíclico e insaciable que le arrastra al desastre.


El filme se sostiene en su reparto, Carell , Chalamet y Tierney dan un “tour de forcé” digno de estudio de personajes y se convierte en una lección  de interpretación , donde sus actuaciones son muy convincentes y emotivas, llegando a ser muy cercanas, pues los espectadores que sean padres se sentirán acongojados, y los que sean hijos, recibirán  un film muy reflexivo. Y es que la cinta no condena, no juzga… solo expone, y eso tiene sus pros y contras, aunque lo mejor de toda la propuesta  es la constatación  de que nada se puede hacer, si la persona afectada no se compromete a cambiar, y que cada decisión es personal a pesar de  que podría sonar a inhumana,  al no querer ayudar a alguien que no quiere ayuda. 


De los tres la menos protagonista es Maura Tierney. Tiene poco diálogo, pero el silencio en ella habla y mucho. Tiene una escena potentísima en el tramo final y consigue desde su posición secundaria darle el punto emotivo del que carecen en gran medida los personajes de sus dos compañeros de reparto.

El joven Timothée Chalamet  vuelve a brillar con luz propia. Si bien su papel no es tan disfrutable y redondo como el de Call me by your name (2017), sí que consigue despertar el sentimiento de desesperación y angustia. El torbellino emocional de su personaje, canalizado en las drogas, encuentra aquí su culminación . Especialmente bien en la parte final, su actuación flojea en un inicio más dubitativo donde su padre en la ficción le gana la partida.

Ese padre ficticio es Steve Carell, el auténtico protagonista de la película . Sí que exploramos el dolor del hijo, pero la cinta se centra mucho más en cómo la caída en desgracia de un hijo cambia radicalmente la vida de unos padres. Carell, que ya viene desde hace años demostrando su enorme potencial como actor, aquí se termina de reivindicar. Lo hace, además, al lado de dos grandes de la interpretación como Tierney y Chalamet, que si bien lo hacen de nota, no alcanzan a Steve Carell.

En definitiva,  posiblemente el filme podría haber sido más crudo, pero opta por centrarse en los sentimientos y no se trata de mostrar más miserias. Un film, en definitiva muy emotivo y lleno de matices. 

martes, 12 de febrero de 2019

Cambio de reinas (Marc Dugain, 2017)

Cambio de reinas (Marc Dugain, 2017)

por Adelaida Valcarce 

Marc Dugain estrena su segundo largometraje como realizador tras su ópera prima An Ordinary Execution. Vuelve a tratarse  de una adaptación cinematográfica de una novela, en esta ocasión de Chantal Thomas. 

Cambio de reinas está ambientada en la corte francesa y la española, durante el siglo XVIII. Fue nominada en 2017 en los premios César a la Mejor película extranjera.

La cinta narra un episodio histórico basado en la politica matrimonial como arma política en las monarquias europeas, dicho recurso hasta hace  poco se ha seguido utilizando para asegurar alianzas o incluso dinastias.
Donde verdaderamente destaca el film es a nivel técnico y visual, Cambio de reinas se convierte en varios momentos en un cuadro vivo: la primera secuencia ya deja constancia de esta intención de convertir al espectador en voyeur cuando la posición de la cámara recrea y enmarca la acción. Los decorados y la dirección artística se encuentran muy trabajadas, consiguiendo transportar al público a  la época histórica que se muestra. Sorprende la ambientación trabajada con mimo y siendo ésta muy preciosista además del plus del  rodaje en el mismísimo Versalles.

Si recordamos otras peliculas históricas anteriores como la de Albert Serra, La mort de Louis XIV (2016), donde subyacen las luchas y pulsiones más crueles de la existencia, o la extraordinaria Agony (1981), de Elem Klímov, nos daremos cuenta de que la cinta tiene ciertas dificultades para alcanzar esa necesaria reflexión que en el fondo deberia tener cualquier película que hable del poder. Su mayor debilidad aparece es recurrir a una cierta superficialidad en vez de apostar por las cuestiones eternas que hacen sufrir a la humanidad.
Esto, unido a una pizca de cinismo y algo de humor absurdo latente en diversos momentos, consigue que recordemos otras cintas politicas francesas como son Crónicas diplomáticas(Bertrand Tavernier, 2013) o El ejercicio del poder (Pierre Schoeller, 2011).

Cambio de reinas es una película muy satisfactoria para aquellos conocedores de la Historia pero también para los que la desconocen, siendo éstos últimos los que saldrán más sorprendidos. Ya se sabe que en la mayor parte de las ocasiones, la realidad supera a la ficción... 

jueves, 3 de enero de 2019

Julieta, desnuda ( Jesse Peretz, 2018)

Julieta, desnuda ( Jesse Peretz, 2018)


Por Adelaida Valcarce 


Si hay una modalidad del género de la comedia romántica que merece ser revisitado cada cierto tiempo para regocijo de sus incondicionales es el  genero de películas denominadas de "amor". En el recuerdo están Love Actually (2003), Notting Hill (1999), Cuatro bodas y un funeral (1994) o  la más reciente Una cuestión de tiempo (2013).

Sin desmerecer al formato de comedia romántica made in Hollywood, los films realizados en Gran Bretaña aportan un toque especial apegado a la realidad, no tan naif, que prefiere encontrar la complicidad del espectador buscando paralelismos con su propia vida. No se trata de un idealismo de cuento de hadas, de algodón de azucar y vacío, sino de  personajes maduros en busca del amor real y ajustado a su edad. Por todo ello, es para celebrar el estreno de Juliet, desnuda, que además está basada en una novela de Nick Hornby, autor también de la celebérrima Alta fidelidad (2000). No llega a las cotas de esta última pero deja un poso en el espectador muy gratificante.

Al igual que en aquel film, en Juliet, desnuda, encontramos a Duncan,  un casi cuarenton un tanto inocente y al que le apasiona la música, aunque aquí su obsesión  se centra en el único álbum lanzado por Tucker Crowe, un músico que, al igual que Sixto Rodríguez, el protagonista de la fantástica Searching for Sugar Man (2012), desapareció hace décadas de la escena musical sin dejar rastro. Pero por azar, la novia de Duncan, Annie, termina intercambiándose correos con el desaparecido músico. Así, un vínculo especial se establece entre Annie y Tucker cuando estos descubren que comparten el mismo sentimiento agridulce: la sospecha de haber desaprovechado buena parte de sus vidas como adultos y de que posiblemente sea demasiado tarde para corregir errores e intentar riesgos que les lleven a existencias más satisfactorias. Es decir, unos sentimientos universales que todos tenemos en algún momento de nuestra trayectoria vital según nos hacemos mayores. 

La cinta nunca llega a ser una comedia desternillante ni un romance único,  pero hay una ternura auténtica en la forma en la que se construye la relación nada ñoña entre Annie y Tucker, por la torpeza de ambos a la hora de acercarse el uno al otro, y porque Rose Byrne y Ethan Hawke están fantásticos dando vida a estos viejóvenes. 

La película se ambienta en uno de esos pueblecitos costeros en los que te aburres como una ostra pero que albergan un encanto peculiar, mientras que la trama aborda conflictos propios de la madurez como crisis vitales, expectativas incumplidas, cómo asumir  los errores del pasado y responsabilidades familiares. Quizá  el personaje al que da vida Chris O’Dowd, el fan irredento y talludito, está un tanto desdibujado, pero es sólo un pequeño detalle que no desmerece el conjunto.  Por otro lado, el desenlace es previsible ,  pero la experiencia del visionado de la cinta es positiva y agradable, porque sientes haber sido testigo de un romance discreto pero profundo entre dos personas que se apoyan ambos para sobreponerse a lo que la vida les tenía designado y que tanto se aleja de los sueños de juventud.

No es una película de honda huella pero si disfrutable y a su modo original, al mostrar las frustraciones del ser humano al crecer de una manera dulce y simpática.