miércoles, 20 de julio de 2022

Un novio para mí mujer (Laura Maña, 2022)

Un novio para mí mujer de Laura Mañá es una comedia aparentemente liviana y simpática que actualiza un film argentino del mismo nombre dirigida aquella en 2008 por Juan Taratuto (No sos vos, soy yo). La historia tiene gran originalidad, siendo el guión correcto y las actuaciones apropiadas. Pero a pesar de lo dicho, me gusta pensar en esta película remake como una reflexión ácida e inteligente sobre la pareja: creo que es una comedia pulida, honesta, sin mayores pretensiones de análisis a simple vista, a la cual le sobran algunos momentos tontos, desaprovecha inexplicablemente otros, y deja la sensación de que el personaje interpretado por Hugo Silva (el Cuervo Flores) daba para algo más.
Estamos ante una pelicula un poco tramposilla en el buen sentido, de esas que se construyen desde la ironía, mucho humor, acidez dialogal y situaciones hilarantes, algunas especialmente geniales. No obstante, detrás de un guión muy bien armado y un montaje preciso, en la cinta se encuentran velados sentimientos de renuncia y sacrificios muy fuertes, escenas conmovedoras en donde la cotidiana sensiblería da lugar a una intimidad reflexiva y hasta conmovedora.
Lo que sin dudas se lleva la palma es el guión, y la profundidad detrás del mismo que no se ve en un primer instante: puede decirse que Un novio para mí mujer es una comedia romántica, pero sería más atinado arriesgarse a catalogarla como una película intimisma, que oculta detrás del humor las idas y vueltas, las pasiones, los dolores, el no renunciamiento de una pareja que se construyó según medida.
Un novio para mi mujer es, en definitiva, una película muy valiente, pues no hay nada peor en un guión que la cobardía de esas descripciones de personajes a los que hay tanto miedo de plantarles defectos, lo que hace que se conviertan en seres irreales y carentes de personalidad. Ese no es sin duda el caso de Un novio para mí mujer, donde los personajes son mostrados de manera realista aún a riesgo de que caigan mal al espectador. Una delicia, en suma.